El saxofonista estadounidense volvió a Chile con una presentación impecable que fusionó elegancia, técnica y una conexión íntima con su público
El inconfundible sonido del saxofón soprano volvió a conquistar los corazones chilenos, el martes 7 de octubre, el legendario saxofonista estadounidense Kenny G, ganador del Premio Grammy y reconocido como el músico instrumental más vendido de la era moderna con más de 75 millones de álbumes en todo el mundo, ofreció un magistral concierto en el Teatro CA660 de Fundación CorpArtes, bajo la producción de FreeFall & Monky Pro.
Su regreso a Chile fue un viaje sonoro por décadas de éxito, romanticismo y sofisticación musical, donde cada nota evocó nostalgia, pasión y admiración por uno de los intérpretes más influyentes en la historia del smooth jazz.
Un inicio elegante: “Loving You” y “Silhouette”
El show comenzó con una sorpresa que desató la euforia en la sala Kenny G apareció entre el público, mientras interpretaba las primeras notas de “Loving You”, su entrada triunfal, rodeado de espectadores que lo aplaudían a escasos centímetros, marcó el inicio de una velada mágica, desde los primeros minutos, el sonido envolvente del saxofón inundó el recinto la velada con un tono romántico y sofisticado, mientras el saxofonista avanzaba tocando entre los asistentes, los músicos fueron subiendo al escenario para sumarse progresivamente, creando un efecto envolvente, a continuación, el público reconoció los primeros acordes de “Silhouette”, uno de los temas más emblemáticos de su carrera, que transportó a los asistentes a los años dorados del smooth jazz.
El músico, acompañado por una banda de extraordinario talento con guitarrista, bajista, pianista, percusionista y baterista, demostró desde el inicio la precisión sonora que caracteriza sus presentaciones, cada nota resonó con nitidez, evidenciando un trabajo técnico y una producción de altísimo nivel.
Virtuosismo y cercanía: el sello de Kenny G
Uno de los momentos más destacados de la noche fue “G-Bop”, donde el saxofonista desplegó su destreza técnica con improvisaciones llenas de energía y swing, tras una breve interacción con el público, continuó con “Sentimental”, deleitando a los presentes con su melancólica calidez.
El carisma de Kenny G no tardó en conquistar a la audiencia chilena, su sentido del humor y humildad se reflejaron en los momentos de diálogo con el público, demostrando una vez más que su grandeza no solo radica en la música, sino también en su conexión humana.
El concierto avanzó con “Havana”, donde guitarra, percusión y batería se lucieron en un despliegue de talento y ritmo latino, Kenny G interactuó con cada integrante de su banda, mostrando complicidad y una conexión que trascendió el escenario.
Uno de los momentos más románticos de la noche llegó con “Forever in Love”, tema ganador del Grammy a la Mejor Interpretación Instrumental Pop en 1994, su interpretación fue un viaje emocional acompañado por luces suaves y una atmósfera cargada de ternura, siendo una de las melodías más esperadas de la noche, que provocó una ovación generalizada.
Momentos íntimos y latinos: “Desafinado”, “Sabor a Mí” y “Bésame Mucho”
En la parte central del espectáculo, Kenny G ofreció momentos de gran intimidad musical, interpretó “Desafinado”, clásico de la bossa nova que ejecutó acompañado por un delicado solo de piano, esta parte del show dio espacio a impresionantes solos de guitarra, percusión y batería, donde cada músico brilló con luz propia. El teatro se llenó de ovaciones cuando, el saxofonista rindió homenaje al público latino con versiones magistrales de los clásicos “Sabor a Mí” y “Bésame Mucho”, dos joyas del repertorio romántico que emocionaron profundamente al público chileno, en versiones exquisitas que mezclaron delicadeza y sentimiento, su fraseo suave y la expresividad de su saxofón lograron conmover al público chileno, que respondió con una ovación cerrada.
Emotividad y excelencia: de “Peruvian Nights” a “Songbird”
La velada continuó con “Peruvian Nights”, una pieza inspirada en los paisajes sudamericanos, que reafirmó el cariño del artista por esta región, este tema fusiona raíces andinas con el jazz contemporáneo y que sirvió de puente hacia los solos de presentación de la banda, cada músico tuvo su momento de lucimiento, destacando el bajo y la percusión por su energía y precisión.
Estos pasajes demostraron no solo su respeto por la música latinoamericana, sino también su capacidad para adaptarse con elegancia a diferentes estilos, manteniendo siempre su sello distintivo.
La noche alcanzó su clímax con clásicos como “Going Home”, himno con el que Kenny G ha cerrado incontables giras, y “Heart & Soul”, pieza que reafirma su maestría para combinar técnica, sentimiento y elegancia.
Final de lujo: “Titanic”
El cierre fue simplemente perfecto “Songbird”, su obra más emblemática, uno de los instantes más esperados fue, sin duda, su tema más icónico y el que lo catapultó al estrellato mundial, fue un momento de pura comunión musical, un clásico universal que marcó el inicio del desenlace del concierto, este tema que envolvió el teatro en una atmósfera de nostalgia y gratitud; le siguió “Titanic (My Heart Will Go On) versión instrumental del clásico tema de la película, acompañado con luces azules que evocaron el océano, un clásico absoluto que selló la noche con una ovación de pie y un ambiente de profunda emoción, Kenny G con una sonrisa y su característico tono cercano, se despidió del público chileno entre aplausos interminables, dejando la promesa de un pronto regreso.
Kenny G: El regreso de un ícono del smooth jazz a Chile
Para los fanáticos chilenos, este reencuentro con Kenny G fue mucho más que un concierto, fue una experiencia sensorial, una clase magistral de música y una celebración del arte instrumental, con una producción impecable, un sonido cristalino y un repertorio que recorrió lo mejor de su carrera, el saxofonista volvió a confirmar su lugar como el máximo exponente del smooth jazz mundial.
Su vínculo con el público chileno es especial, cada visita ha sido un reencuentro cargado de emoción, admiración y respeto mutuo, en esta presentación, el artista volvió a demostrar que su talento y calidez humana son tan grandes como su legado musical.
Kenny G no solo ofreció un espectáculo musical, sino una experiencia de virtuosismo, sensibilidad y cercanía, en una noche donde cada nota tocó el alma, el Teatro CA660 de Fundación CorpArtes, se convirtió en un templo de la música, donde el saxofón habló directamente al corazón de los presentes, fue, sin duda, una noche que quedará grabada en la memoria de todos los que tuvieron el privilegio de vivirla.
Gracias a nuestros amigos de FreeFall & Monky Pro, por la invitación.
✍ Reseña Lisbeth Castillo
📸Fotos: Luis Graterol
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